Barry Sonnenfeld, director de las películas de La familia Addams, será el responsable de traducir a imágenes ‘Una serie de catastróficas desdichas’ de Lemony Snicket.
No es una decisión nada disparatada: Sonnenfeld ya demostró que podía combinar gusto por lo morboso y macabro y humor negro para todos los públicos en las dos entregas de La Familia Addams, más un peculiar tono cartoon que también se dejaba notar en Men in Black o en la no-tan-horrible-como-recuerdas Wild Wild West. Sonnenfeld, además, fue el primer director asociado a la extraordinaria adaptación cinematográfica de Una serie de catastróficas desdichas de 2004, que acabó siendo dirigida por Brad Silberling después de que Tim Burton también dejara la producción, como Sonnenfeld, por diferencias presupuestarias. Sonnenfeld, de hecho, escribió el primer guion del largometraje en colaboración con el propio Daniel Handler (identidad real de Lemony Snicket). Esa labor, finalmente, recayó en manos de Robert Gordon.
Para esta serie de Netflix se cuenta también con Mark Hudis, que recién llegado desde True Blood será el productor ejecutivo y showrunner de la serie. El canal quiere con estas dos elecciones, obviamente, conservar el peculiarísimo y algo complicado tono de las trece novelas con las aventuras de los tres infelices huérfanos que huyen sin descanso de los tejemanejes de su malvado tío, deseoso de acogerlos en su regazo para cobrar una sustanciosa herencia. Las declaraciones de Snicket, muy en su papel, son tan irónicas y deliciosas como de costumbre: «No puedo creerlo. Después de años proporcionando entretenimiendo de alta calidad bajo demanda, Netflix arriesga su reputación aociando su nombre con mis pasmosos y decepcionantes libros«.
De momento, tenemos un estupendo teaser que durante días pasó por auténtico y que acabó revelándose como obra de un fan de los libros. Si Netflix consigue capturar esta atmósfera de gótico juguetón y amenazante, desde luego, tiene nuestra confianza.