Electrónica atmosférica, etérea y llena de sintetizadores que construyen un paisaje oscuro y frío… el amor, el desamor y sus daños colaterales son el hilo conductor de la música de Tropic of Cancer, que llegará este sábado 27 de mayo a la sala Caracol de Madrid. Hablamos con la productora estadounidense Camella Lobo, cantante y compositora estadounidense de Tropic of Cancer, antes del concierto.
Fotos: Sara Llobet
Camella Lobo formó Tropic of Cancer en 2007, junto al su entonces marido, Juan Mendez, más conocido como productor por el nombre de Silent Servant. Este fue fundamental en la primera etapa de la banda, ya que Lobo tenía formación como periodista musical (trabajó para publicaciones como The Village Voice o The L.A. Record), pero no como músico. Sin embargo, el post punk, la new wave y la música gótica fue lo que le hizo dar los primeros pasos en su trayectoria musical, primero como periodista, después como DJ, hasta convertirlo en su profesión, su pasión y su forma de vivir.
En 2011 Lobo tomó las riendas del proyecto musical y dos años después lanzó el primer material desde su disco debut, llamado Restless Idylls (2013). Actualmente, Lobo está trabajando en un nuevo disco y el sábado 27 de mayo viene a presentar el EP Stop Suffering, un pequeño aperitivo del que será su próximo trabajo. Hablamos con ella de la banda y sus proyectos de futuro.
RUTH GARCÍA: Tropic Of Cancer… ¿el sugerente nombre de la banda viene de la localización geográfica, como homenaje a esa parte de la Tierra, o de la novela de Henry Miller?
CAMELLA LOBO: En realidad todo viene porque cuando empecé a trabajar con la música pasé dos semanas en Guatemala y mi abuela me decía: “Oh, Guatemala está en el Trópico de Cáncer”, y ese nombre sonaba en mi cabeza todo el rato a partir de ahí, y se implantó súper rápido como nombre para definir en lo que estaba trabajando. Así que sí, definitivamente fue por la localización geográfica… y por la influencia de mi abuela en la banda (risas).
RG: Stop Suffering es un EP mucho más atmosférico y electrónico que los anteriores, que tienen un punto más new wave. ¿El nuevo álbum en el que estás ahora trabajando va a seguir esta misma línea?
CL: Veremos, estamos en el proceso de composición de los temas. De momento tengo un par de canciones en las que estoy trabajando ahora mismo y seguro que seguirá siendo electrónico, aunque diferente también.
RG: ¿Será quizás algo más cercano al post punk y la new wave, en la línea de temas como Be brave?
CL: Bueno, cuando formé Tropic of Cancer estaba muy presente la influencia de mi marido Juan y es por ello que tenía ese sonido más post punk. Pero cuando me hice con el proyecto, busqué sacar mi propio sonido y todo cambió totalmente… ha cambiado con los años.
RG: ¿Sigues pensando que la electrónica es el nuevo punk?
CL: Desde luego. La accesibilidad a la música electrónica, la complejidad que puede tener la electrónica hecha con pocos elementos, es mucho más salvaje.
RG: A finales de 2015 te quedaste embarazada. ¿Influyó eso a la hora de componer, a la hora de tocar, de entender la música?
CL: Desde luego, para empezar es un arduo trabajo (risas). Definitivamente influye en cómo vives la música durante esos meses. Cuando estaba componiendo el último EP ya estaba embarazada pero no lo sabía. Así que tenía un montón de emociones fluyendo dentro de mi, estaban sucediendo muchos cambios en mi vida. Era una locura y no sabía muy bien porqué sucedía.. Fueron momentos muy felices porque estaba trabajando mucho en el disco, pero casi me vuelvo loca (risas).
RG: Escuché, antes de venir a esta entrevista, un set que grabaste, todo en vinilo, para un Halloween, hará como unos 6 años y me sorprendió muchísimo porque era un viaje a través de estilos tan versátiles como el psychobilly, el post punk, la música oscura. En general era muy sesentero, con guiños a la primera electrónica del palo Suicide… ¿es aquí donde encuentras tu inspiración a la hora de expresarte musicalmente?
CL: Absolutamente, cada una de las bandas o artistas que están presentes me han influenciado a la hora de hacer música. Justo en ese momento yo estaba ya haciendo música con Tropic of Cancer, pero había empezado hacía unos meses a hacer mis mixes como DJ. Me encanta pinchar, me proporciona la excusa perfecta para sumergirme en toda esa música, me da la posibilidad de descubrir temas y bandas que no había escuchado antes.
RG: ¿Por qué Los Angeles?
CL: Nací y crecí en Los Angeles. Es un lugar que he aprendido a apreciar sobremanera en los últimos años. Estuve una temporada en Mineapolis y el clima es mucho más frío y el mood es diferente totalmente. Es por eso que realmente disfruto de Los Angeles, en los últimos cuatro años he redescubierto la ciudad, la he visto con otros ojos, me he vuelto a enamorar de ella y ahora mismo es donde quiero estar.
RG: ¿Podríamos hablar de una escena musical propia de Los Angeles?
CL: Desde luego, en Los Angeles hay gente de todo el mundo, es una ciudad realmente creativa musicalmente, es imprescindible recalar en ella.
RG: ¿Crees que la situación política actual de tu país, con Trump como presidente del Gobierno, puede influir de alguna manera en la creatividad y la escena musical?
CL: Te agradezco la pregunta porque es algo que no podemos dejar de lado. Realmente estoy preocupada por la situación, pero al mismo tiempo esperanzada. Lo que me ha enseñado este país es la habilidad de la gente para luchar juntos contra las injusticias sociales, estar unidos para defender a personas que tienen una situación económica de riesgo, a los que son más desfavorecidos por ser de otra nacionalidad… Me siento realmente inspirada, tanto por personas que conozco y amigos como por gente que no lo es, pero que luchan juntos contra la desigualdad. Es duro pensar en cosas como grabar un disco cuando toda esta pesadilla está sucediendo ante nosotros cada día. No es algo que podamos ignorar, es parte de la realidad.
RG: La primera vez que te vi tocar fue en Moog (Barcelona) un club más pequeño, más íntimo, que la sala Caracol, que es un local para más del doble de audiencia. ¿Qué expectativas tienes para este sábado?
CL: El live en Moog fue especial, es un local muy cálido, se vive todo con mucha pasión, es mucho más salvaje en ese sentido, más cercano con el público. Quizás eso es lo malo de los locales grandes, hay demasiada gente y a veces el público habla… es un rollo diferente, no quiere decir que no sea pasional, sólo es diferente. Además ese show en Moog pasará a la historia por ser uno de mis favoritos, pero estoy segura de que el de Madrid será también muy especial.