Toda estrella del pop tiene un patito feo, o varios, en su repertorio. De Madonna a Madness, de Michael Jackson a Iron Maiden, os traemos una retahíla de temazos de artistas de éxito, que deberían haber sido hits... pero nunca lo fueron.
¿Qué es lo que distingue a un verdadero fan de un simple aficionadillo? Aquí, la verdad, no tenemos ni idea. Y, vista la imbecilidad de los debates que se forman al respecto en internet, preferimos no tenerla. Pero sí hay algo que sospechamos: la auténtica devoción por una estrella del pop no lleva sólo a defenderla a capa y espada en las trifulcas de un foro. También ayuda a reconocer esas joyas ocultas que duermen en su discografía, y de las cuales el mainstream ha pasado olímpicamente. Y de eso es justo de lo que va nuestra playlist de la semana.
Para variar, aquí tenemos de todo: desde discos que son vistos como manchas de carreras gloriosas (a ver si el Chameleon de Helloween va a ser mejor de lo que dicen…) a artistazos que volvieron del exilio, entregaron auténticas joyas… y no se comieron un colín, como, sin ir más lejos, Madness. También hay canciones que languidecen a la sombra de hits apoteósicos: vean, si no, el caso de la pobre She’s A Lady, uno de los mejores temas de Pulp, pero en la que nadie se fijó porque iba justo después de Babies en el orden del disco. Claro que existe algo peor, y es pasar a la historia como una pieza incomprendida de un presunto one hit wonder, como The Knack o Bloodhound Gang. Y no se crean que los mayores divos y las divas más relucientes se salvan de la quema: Michael Jackson y Madonna están representados también aquí, el primero con una de las piezas más atrevidas de HIStory, y la segunda con Rain, la pieza que daba colofón a esa incomprendida gamberrada que se tituló Erotica. Hágannos caso: todas estas canciones son muy buenas, y todas están esperándoles para que ustedes las reivindiquen como las maravillas que son… hasta la semana que viene, cuando vuelvan a sumergirse en el olvido.
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