Coincidiendo con el anuncio de la fecha (15 de diciembre) y precio (gratuita, pero con un pago adicional de nada menos que 9'99 dólares in-app para desbloquear el juego completo), Super Mario Run, el esperadísimo desembarco de Nintendo en el mundo de los juegos para móviles, se deja ver en movimiento con un trailer que desvela alguno de sus secretos.
Estaba claro que Nintendo, después de tantos años haciéndose el remolón para dejar caer su franquicia más preciada en un hardware no propietario, no podía hacerlo con un juego al uso. Después de desvelar Super Mario Run en la keynote de Apple donde se anunció el iPhone 7 -lo que garantiza una exclusiva temporal para la compañía norteamericana-, la industria se preguntaba si Nintendo podría poner patas arriba la industria de los smartphones, habida cuenta de la experiencia de la compañía japonesa con el tema portátil.
La respuesta parece ser a la vez positiva y negativa. Super Mario Run no parece (¡no puede!) tener la profundidad de manejo y mecánica de un Mario convencional (ya tenemos anunciado un nuevo Super Mario para Nintendo Switch, debería ser suficiente para calmar ese tipo de ansias), pero lo cierto es que Super Mario Run pinta mejor que casi cualquier infinite runner que hayamos visto: de acuerdo, se juega con una mano, pero las piruetas y distintos movimientos derivados de una sola pulsación en el momento justo garantizan cierta variedad. Parece lógico pensar que sencillos combos y la apertura de zonas secretas, así como distintas formas de puntuar más que el vecino, estarán a la orden del día. El elevado precio, la posibilidad de competir con ghost runners de amigos y un editor de niveles que aquí se adivina sencillo pero con el que no deberíamos dar nada por sentado hacen pensar que Super Mario Run va a durar algo más que una tarde tonta.
De momento, allá va el trailer: