La serie desarrollada por Raphael Bob-Waksberg concluye tras hacernos sufrir mucho más de lo que jamás pensamos que sufriríamos por culpa de un caballo depresivo que fue la estrella de una sitcom durante los noventa. Y lo ha hecho con una última tanda de capítulos muy combativa, tan capaz de movernos a la desesperanza absoluta como de todo lo contrario.
Dos aves treintañeras deben hacer frente a los vaivenes de su vida en pleno s. XXI. Precariedad laboral, amistades que se distancian, parejas que no funcionan, machismo en todas sus variantes… Problemas de las mujeres actuales tratados con un humor desenfrenado que te harán identificarte con la tucán hiperactiva y la exigente pájaro cantor que protagonizan la nueva serie de Netflix.
Raphael Bob-Waksberg no había cumplido los 30 años cuando logró que Netflix comprara su idea para hacer ‘BoJack Horseman’, consiguiendo, además, total libertad creativa para esos doce primeros capítulos. Ahora, la tercera temporada confirma lo que ya muchas de nosotras sospechábamos: ‘BoJack Horseman’ es la mejor serie del momento.
Tendrás que hacértelos tú, pero como invento siguen siendo geniales (además de una monada). Estos bonitos calcetines de punto son ideales para quienes gustan de ver los programas de Netflix en la cama, con el edredón hasta el cuello y los ojos cerrándose a cada plano…